Educación
Antecedentes
La educación desempeña un papel clave para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Además, la educación puede mejorar la vida de la gente en áreas como la salud, la participación ciudadana, el interés político y la felicidad. Diversos estudios muestran que las personas con un buen nivel educativo viven más, participan más activamente en la política y en la comunidad en la que viven, cometen menos delitos y dependen menos de la asistencia social.
Años de educación
En una economía en la que los conocimientos cambian con rapidez, la educación tiene por objeto enseñar competencias para la vida. Pero, ¿cuántos años en la escuela, la universidad o un centro de formación esperarán estudiar las nuevas generaciones? La respuesta es que en promedio, en la OCDE las personas pueden esperar recibir cerca de 18 años de educación, a juzgar por el número de habitantes entre 5 y 39 años de edad que en la actualidad asisten a la escuela o la universidad. Los resultados varían entre cerca de 14 años de educación en Colombia y más de 20 años en Australia.
Logro educativo
Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero para alcanzar una buena calidad de vida. Las personas con un alto nivel educativo resultan menos afectadas por las tendencias del desempleo, por lo general debido a que sus logros educativos aumentan el atractivo de su perfil profesional en la fuerza laboral. Los ingresos de por vida también aumentan con cada nivel educativo obtenido.
Por otra parte, las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en el conocimiento. Este cambio en la demanda ha hecho que el requisito mínimo para encontrar empleo en casi todos los países de la OCDE sea un título de educación media superior. Por consiguiente, las tasas de graduación en educación media superior son un buen indicador de si un país está preparando a sus estudiantes para cumplir con los requisitos mínimos del mercado laboral.
En promedio, alrededor del 79% de los adultos entre 25 y 64 años de edad en la zona de la OCDE han obtenido el equivalente a un título de educación media superior. En 33 países de la OCDE y la Federación de Rusia, el 60% o más de la población entre 25 y 64 años de edad han terminado por lo menos la educación media superior. Pero en algunos países sucede lo contrario: en Colombia, México y Turquía, el 57% o más de las personas entre 25 y 64 años de edad no ha terminado la educación media superior. Sin embargo, las mujeres tienen más probabilidades que los hombres de obtener un título de educación superior o equivalente en la mayoría de los países de la OCDE, en contraposición a la tendencia histórica. En promedio en los países de la OCDE, el 42% de las mujeres entre 25 y 64 años de edad obtiene un título de educación superior, en comparación con el 35% de los hombres.
Competencias de los estudiantes
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes que se acercan al final de su educación obligatoria (normalmente en torno a los 15 años de edad) han adquirido algunos de los conocimientos y competencias que resultan esenciales para participar plenamente en las sociedades modernas, en particular en las áreas de lectura, matemáticas y ciencias.
En 2018, PISA examinó a estudiantes de 79 países, incluidos los pertenecientes a la OCDE, Brasil, la Federación de Rusia y Sudáfrica. Se analizaron la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias de los estudiantes. La investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela o a adquirir una formación complementaria. El estudiante medio de la zona de la OCDE obtuvo una calificación de 488 puntos. En promedio, en la OCDE las niñas obtuvieron una calificación de 491 puntos en comparación con 485 puntos de los niños.
Estonia es el país con mayor rendimiento educativo en la OCDE, con una media de calificaciones PISA de 526 puntos, seguido por Japón y Corea con 520 puntos. El país de la OCDE con el menor rendimiento educativo, Colombia, tiene una calificación media de 406. Esto significa que la brecha entre los países con el mayor y el menor rendimiento de la OCDE es de 120 puntos.
Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes. Por ejemplo, en Canadá, Estonia, Finlandia e Irlanda, los estudiantes tienden a obtener buenos resultados sin importar cuál sea su entorno social. Sin embargo, en Israel y Luxemburgo, la brecha entre los estudiantes del nivel socioeconómico más bajo y los estudiantes del nivel socioeconómico más alto alcanza más de 120 puntos, lo que sugiere que el entorno socioeconómico de los estudiantes tiende a influir en sus resultados. En promedio, en los países de la OCDE hay una creciente diferencia de 89 puntos en las calificaciones de PISA entre los estudiantes del nivel socioeconómico más alto y los del más bajo.
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Educación en Detalle por País
lva Educacion - Letonia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los letones pueden esperar pasar 18.2 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Letonia, el 89% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Letonia obtuvo un resultado de 487 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra ligeramente menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Proyecto piloto "Servicio de apoyo al cuidado de los niños y guardería"
En 2013, el Gobierno letón puso en marcha el proyecto piloto "Servicio de apoyo al cuidado de los niños y guardería" para ayudar a los padres a financiar el cuidado de los niños de entre 1.5 y 4 años que no tienen acceso a las guarderías públicas. La financiación se ofreció hasta finales de 2015 para resolver el problema de las largas listas de espera para la inscripción en guarderías públicas.
Dado que los problemas familiares y la insuficiencia de las redes de apoyo a la familia son las principales causas de abandono de la escuela primaria, un proyecto piloto en la ciudad letona de Cēsis tenía como objetivo reducir las tasas de abandono y mejorar el sistema de apoyo social a las familias y los niños. A través del proyecto "Mano a mano para el apoyo a los niños", se formó a 28 personas para que trabajaran directamente con los padres en la educación infantil, los centros de atención y las escuelas primarias. El objetivo general del proyecto de 2008-2010 era desarrollar mecanismos que detecten cuándo se necesita apoyo para los estudiantes y sus familias, y garantizar que estos estudiantes y familias reciban la ayuda oportuna. El proyecto trabajó para mejorar la cooperación entre los estudiantes, los padres, las escuelas y otras instituciones de la administración local con el fin de resolver diversos problemas cotidianos relacionados con los niños y sus familias.
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zaf Educacion - Sudáfrica más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los sudafricanos pasan menos años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Sudáfrica, el 48% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra menor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
No se cuenta con datos disponibles sobre Sudáfrica, pero la evidencia de otros países de la OCDE sugiere quelos sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Colaborar para impulsar competencias
El gobierno sudafricano y las organizaciones no gubernamentales han emprendido una serie de iniciativas para desarrollar competencias. El proyecto Massive Open Online Varsity (MOOV) proporciona un mayor acceso a la educación de calidad a través de cursos en línea de todo el mundo. Se han creado centros MOOV en 12 bibliotecas públicas de Johannesburgo, dirigidos a zonas pobres. Cada centro tiene capacidad para 50 estudiantes y no hay cuotas ni requisitos de acceso. En los primeros 12 meses tras el lanzamiento del proyecto, se inscribieron 8 000 estudiantes y se obtuvieron más de 500 certificados de instituciones acreditadas.
El Fondo Nacional de Competencias se destina principalmente a la inversión en educación y formación, al desarrollo de infraestructuras de competencias y a la investigación sobre el desarrollo de competencias. Algunos ejemplos de proyectos cofinanciados por el Fondo son el Programa de Prácticas Itukise para Graduados Desempleados y un proyecto piloto de aprendizaje de doble vía. El programa Itukise ofrece unas prácticas remuneradas de 12 meses en el sector privado para ayudar a los graduados desempleados a adquirir una experiencia laboral relevante. En los dos primeros años se colocó a unas 1 500 personas en 169 empresas. El programa piloto de aprendizaje dual se basa en los sistemas alemán y suizo y combina la formación en la escuela y en el lugar de trabajo. El proyecto piloto, aplicado por primera vez en tres lugares, ha ayudado tanto a las escuelas como a los empresarios, pero es necesario hacer más para animar a los empresarios a participar.
Aumentar los recursos educativos
El programa Iniciativa para el Desarrollo Acelerado de las Infraestructuras Escolares (ASIDI, por sus siglas en inglés) fue un proyecto puntual para mejorar las infraestructuras de 400 escuelas. El programa se amplió para abordar la escasez de material didáctico, como los libros de texto. Entre 2013/2014 y 2014/2015 la proporción de alumnos con acceso a los libros de texto necesarios en todos los grados y asignaturas aumentó del 92% a una cobertura cercana al 100%. La provincia de Gauteng también se ha comprometido a ampliar el uso de la tecnología en la educación. Ha puesto en marcha un proyecto piloto con pizarras inteligentes, tabletas y la conectividad necesaria en determinadas escuelas de zonas pobres. La tecnología de las pizarras inteligentes también está disponible para la enseñanza del grado 12 en todas las escuelas públicas de la provincia.
La escasez de profesores es un problema de larga data en Sudáfrica. Para animar a un mayor número de estudiantes a ejercer la profesión docente, el programa de becas Funza Lushaka para estudios de magisterio se ha incrementado en algo menos de 100 millones de ZAR. Esto ha apoyado la entrada en el sistema de casi 10 000 profesores recién titulados desde 2013.
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deu Educación – Alemania más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los alemanes pueden esperar pasar cerca de 18.2 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Alemania, el 86% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Alemania obtuvo un resultado de 500 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Las mejores prácticas en la educación vocacional y técnica (VET, por sus siglas en inglés)
El exitoso modelo de formación profesional de Alemania, basado en un sistema de doble aprendizaje, tiene una larga historia y es ampliamente respetado. Los estudiantes de bachillerato pueden elegir entre cursar la enseñanza secundaria superior académica al final de la educación obligatoria o seguir una vía profesional. La vía profesional incluye una escuela de formación profesional a tiempo completo o el sistema de aprendizaje dual.
En el sistema dual, los estudiantes dividen su tiempo entre la formación en el lugar de trabajo y la formación en la escuela. La escuela imparte tanto la educación general como la específica de la profesión, mientras que los empresarios supervisan y ofrecen la formación en el lugar de trabajo. Tanto el gobierno como los empresarios están muy comprometidos y tienen un papel central en el diseño de la educación. La participación de los empresarios en el sistema dual también permite adaptar los programas a las necesidades locales. El gobierno regula la calidad del empleo a través de programas de formación nacionales estandarizados y vinculantes para que las necesidades a corto plazo de los empresarios no obstaculicen los objetivos educativos y económicos del sistema. Los contratos de aprendizaje también están protegidos por salarios acordados colectivamente. En 2014, el 48% de los estudiantes alemanes de secundaria superior estaban matriculados en programas de formación profesional, de los cuales el 86% participaban en el sistema de aprendizaje dual.
Impulsar las habilidades STEM
La iniciativa "La casa de los pequeños científicos" da prioridad al desarrollo de las competencias de la primera infancia en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés). La iniciativa se puso en marcha en 2016 para crear entusiasmo entre los niños por las ciencias naturales y la tecnología, promover la (co)construcción en los procesos educativos y fomentar las competencias básicas, como el aprendizaje, el lenguaje, la motricidad fina y las habilidades sociales. El interés por STEM se fomenta a través de talleres y jornadas de promoción, así como de actividades y programas educativos para las guarderías a través de nuevas redes locales.
Tras un proyecto piloto inicial en el que participaron 50 centros preescolares de Berlín, la iniciativa se extendió por toda Alemania a más de 20 000 centros preescolares, guarderías y escuelas primarias. Se espera que la iniciativa de la Casa de los Pequeños Científicos extienda sus actividades a un total de 47 000 instituciones.
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aus Educación – Australia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los australianos pueden esperar pasar 20.4 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 18 años, y el nivel más alto de la OCDE.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Australia, el 84% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
En Australia, el estudiante medio obtuvo un resultado de 499 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Mejorar la salud mental y el bienestar de los estudiantes
KidsMatter fomenta las alianzas entre los sectores de salud y comunidad, educación y primera infancia con el fin de mejorar la salud mental y el bienestar de los niños.
El programa KidsMatter para la Primera Infancia se lleva a cabo en escuelas preescolares, jardines de niños y servicios de guardería con horarios largos. Apoya la educación y la práctica del cuidado y atención de la primera infancia, y conecta a educadores, niños, familias, administradores y profesionales comunitarios y de la salud.
El programa KidsMatter para la Educación Primaria utiliza un enfoque escolar integral para desarrollar e implementar estrategias de promoción de la salud mental, prevención e intervención temprana basadas en pruebas. El marco consiste en cuatro áreas clave: comunidad escolar positiva; aprendizaje social y emocional para estudiantes; apoyo y educación para padres e intervención temprana para estudiantes con problemas de salud mental.
KidsMatter, que inició como programa piloto en 101 escuelas de 2007 a 2008, se amplió después de que en una evaluación se detectara una mejora general en la salud mental y el bienestar de los estudiantes, incluyendo su optimismo, su capacidad para soportar presiones y su conducta. También aumentaron la capacidad y los conocimientos de los profesores, lo cual permitió ofrecer más apoyo a los niños y sus familias.
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aut Educación – Austria más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los austriacos pueden esperar pasar 17 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra similar al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Austria, el 86% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Austria obtuvo un resultado de 491 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Ayudar a los jóvenes a permanecer en la escuela
El programa austriaco Youth Coaching ayuda a los niños a permanecer en la escuela y a recuperar a los que ya la han abandonado. Los entrenadores de jóvenes ayudan a los participantes a fijar objetivos y ofrecen servicios de apoyo como consultas y asesoramiento educativo. También se consulta a expertos externos, como trabajadores sociales y psicólogos, cuando es necesario. Estos servicios de apoyo están disponibles para los jóvenes en su noveno año escolar, los jóvenes que ni tienen empleo, ni educación o formación (NINI) menores de 19 años, y los jóvenes con una discapacidad o necesidades educativas especiales menores de 25 años. El programa se organiza en un proceso de tres etapas que deben completarse en el plazo de un año.
Aunque todavía está en fase de prueba, el Coaching para Jóvenes está funcionando como un centro útil para los cuidadores. De los participantes en el programa, solo el 7% ha abandonado y el 85% ha conseguido resultados acordes con sus objetivos. Se necesita una mayor armonización del programa y mejores métodos de divulgación para mejorar el programa.
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bra Educación – Brasil más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los brasileños pueden esperar pasar 16.2 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra menor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Brasil, el 57% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mucho menor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Brasil obtuvo un resultado de 400 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Alfabetización financiera
La labor de alfabetización financiera en las escuelas es parte importante de la Estrategia Nacional Brasileña para la Educación Financiera (ENBEF). El programa integra la educación financiera al plan de estudios de secundaria e incorpora casos prácticos sobre alfabetización financiera a las matemáticas, la lengua y la literatura, las ciencias, la sociología y otras disciplinas. En la evaluación de un estudio piloto efectuado en 891 escuelas secundarias en seis estados del país, se encontró que el nivel medio de competencia y autonomía financieras y la actitud hacia los ahorros era más alto en quienes participaron en el programa. En las familias en las que los estudiantes tomaron el programa aumentaron los conocimientos financieros parentales y un mayor número de ellas comenzó a elaborar presupuestos para el hogar. El gobierno también llevará a cabo programas piloto de educación financiera en las escuelas primarias.
Recompensar a los buenos docentes
Pernambuco y Río de Janeiro implementaron programas para recompensar a los buenos docentes. Si resultan exitosas, estas iniciativas podrían extenderse a todo el país, con miras a mejorar la calidad de los profesores y del aprendizaje en Brasil.
El programa de bonos para docentes de Pernambuco recompensa el desempeño más que los conocimientos sobre la materia y opera en el nivel escolar más que en el individual. Los objetivos de la mejora escolar se fijan cada año y las escuelas que alcanzan por lo menos el 50% reciben un bono proporcional a su desempeño. Por ejemplo, en las escuelas que alcanzan el 75% de sus objetivos, el personal docente y no docente recibe el 75% del bono medio (prorrateado por nivel salarial). De nuevo, se realizan evaluaciones profundas y continuas del programa, pero los resultados iniciales sugieren que las escuelas con objetivos más ambiciosos alcanzaron mayores avances y los niveles de aprendizaje en todo el estado mejoraron de forma considerable.
Río de Janeiro adoptó un programa de bonos similar al de Pernambuco, el cual también establece objetivos de mejora en el nivel escolar como la base para otorgar reconocimientos monetarios. Sin embargo, el programa de Río impone además fuertes sanciones por faltas de los docentes: los empleados con más de cinco faltas durante el año escolar no calificarían para recibirla.
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bel Educación – Bélgica más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los belgas pueden esperar pasar 19.5 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Bélgica, cerca de 80% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra ligeramente mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Bélgica obtuvo un resultado de 500 en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Reformar la educación para obtener mejores resultados
Si bien el rendimiento educativo en Bélgica es alto, ha disminuido en años recientes y son demasiados los jóvenes que no terminan con éxito la educación media superior. Tanto la comunidad francesa como la flamenca han emprendido reformas educativas para integrar mejor a los migrantes y resolver la desaceleración actual en la finalización de estudios.
En la actualidad la comunidad francesa ha implantado un programa de reforma referente a la educación obligatoria (periodo 2015-2025), el cual otorga a escuelas y padres mayor autonomía y requiere que las escuelas con desempeño deficiente elaboren planes para superar el bajo rendimiento, proporcionar formación continua para los docentes y mejorar la capacitación en diversidad social, cultural y pedagógica. Por su parte, el gobierno de la región de Flandes planifica finalizar una reforma en 2020 para mejorar la formación docente y modernizar la educación secundaria. La región contrató también apoyo adicional en idiomas en la educación preprimaria, primaria y secundaria, con el fin de ayudar a los niños migrantes a obtener buenos resultados. Todas estas iniciativas incluyen mejoras en la educación vocacional para adaptar mejor las competencias al mercado laboral y se consideran un paso en la dirección correcta hacia la mejora de resultados y la preservación de la ventaja comparativa de Bélgica en el área educativa.
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can Educación – Canadá más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los canadienses pueden esperar pasar 17 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra similar al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Canadá, el 92% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mucho mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
Canadá es un país de la OCDE con altos resultados en lectura, matemáticas y ciencias; el estudiante medio obtiene un resultado de 517, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Apoyar a estudiantes desfavorecidos
Los estudiantes canadienses muestran un buen desempeño, independientemente de su estatus socioeconómico, su lengua materna o su calidad de canadienses nativos o inmigrantes recientes. Los programas focalizados han ayudado a que grupos de población vulnerables alcancen niveles educativos más altos.
Por ejemplo, el Programa Pathways to Education (Caminos hacia la Educación) ayuda a los jóvenes de comunidades desfavorecidas a completar la educación secundaria. Padres de familia, organismos comunitarios, voluntarios, juntas escolares locales y escuelas secundarias colaboran para ofrecer cuatro tipos principales de apoyo: tutoría académica, orientación vocacional y grupal, promoción y apoyo financiero.
En 2001, Pathways to Education se inició como programa piloto en el barrio Regent Park de Toronto. Para 2013, el programa se amplió a 12 barrios adicionales, incluidas comunidades indígenas. En una evaluación de los primeros cinco grupos participantes en el programa, realizada en 2010, se encontró que las tasas de deserción escolar bajaron de una cifra excepcionalmente alta de 56% a menos de 11.7%. Otros resultados positivos incluyen tasas reducidas de ausentismo, mayor representación en la corriente académica y tasas más altas de graduación y de educación postsecundaria. En 2011-2012, la cantidad de graduados de Pathways matriculados en educación postsecundaria creció a 75%, en comparación con 61% de los estudiantes del mismo barrio que no participaban en el programa.
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chl Educación – Chile más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los chilenos pueden esperar pasar 17.4 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra similar al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Chile, el 67% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra menor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Chile obtuvo un resultado de 438 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra menor que el promedio de la OCDE de 488 y una de las más bajas en la OCDE. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Invertir en los jóvenes
Si bien las tasas de matrícula han mejorado —casi todos los menores de 5 a 17 años de edad acuden a la escuela—, el desempeño y el acceso a la educación de calidad son desiguales. El gobierno chileno ha adoptado medidas relevantes para invertir más en educación y atención de la primera infancia, hacer más incluyentes a las escuelas y reestructurar las carreras de los profesores. Asimismo, promueve políticas para mejorar el acceso a la educación terciaria de calidad para estudiantes de entornos socioeconómicos de nivel medio y bajo. Reformas educativas recientes se dirigen a crear mejores oportunidades para poblaciones vulnerables. Algunos objetivos esenciales son los siguientes: establecer escuelas más incluyentes; reestructurar la carrera docente, reforzar la educación y la atención de la primera infancia; aumentar la calidad de la educación primaria, secundaria y terciaria, y reducir las brechas de capacidad entre los grupos socioeconómicos.
En 2013 se promulgó una ley que declaró universal la educación en jardín de niños y el gobierno ha asignado alta prioridad a la ampliación de la educación de la primera infancia. La Ley de Inclusión y Equidad recientemente promulgada pone freno a la selección del estudiante por parte de las escuelas públicas y privadas subsidiadas, práctica que colocaba de forma desproporcionada a los estudiantes de entornos socioeconómicos más bajos en escuelas con mal desempeño. La ley también prohíbe la operación de escuelas con fines de lucro, elimina los pagos complementarios y aumenta la financiación para que los estudiantes de grupos vulnerables utilicen un sistema de cupones. Se espera que el cese de estas prácticas reduzca las inequidades al mejorar el acceso a la educación de calidad.
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kor Educación – Corea más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los coreanos pueden esperar pasar 17.2 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra coincidente al promedio de la OCDE de 17.2 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Corea, el 89% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
Corea es uno de los países de la OCDE con mayor rendimiento en lectura, matemáticas y ciencias; el estudiante medio obtiene un resultado de 520 puntos, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488.Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Combinar la experiencia laboral y escolar
El Plan de Fomento de la Enseñanza Secundaria Profesional (2010-2015) tenía como objetivo construir escuelas de formación profesional basadas en las necesidades industriales y en las competencias específicas del sector, favoreciendo el trabajo en lugar del ingreso en la universidad tras la graduación en la escuela secundaria. La mejora de la calidad y la relevancia de la formación profesional en Corea es una prioridad, ya que la tasa media de empleo de los graduados de la escuela secundaria y de los graduados de la escuela secundaria profesional especializada fue solo del 61% y del 41%, respectivamente, en 2013.
Una de las piedras angulares del Plan fue la creación de las escuelas Meister, que permiten a los estudiantes combinar trabajo y estudio, basándose en el modelo alemán de formación de artesanos. Actualmente hay 41 escuelas Meister en Corea, con más de 16 000 estudiantes, y seis más previstas para 2016-2017. La tasa de colocación de los graduados de las escuelas Meister es superior al 90%, frente a solo el 44% de las escuelas secundarias de formación profesional tradicionales.
Una segunda iniciativa es el Sistema Dual de Trabajo-Estudio, que pretende involucrar a 70 000 estudiantes/trabajadores y 10 000 empresas en un sistema de aprendizaje, poniendo en marcha programas en los institutos de formación profesional, en los colegios estatales menores y en las universidades. Como la mayoría de las empresas participantes son PYME, el sistema se enfrenta a retos financieros. Para limitar el coste fiscal a medida que el programa se amplía, debería reformarse para que sea más rentable para las empresas y los estudiantes; las PYME podrían establecer centros de formación conjuntos, por ejemplo.
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dnk Educación – Dinamarca más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los daneses pueden esperar pasar 19.3 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 18 años y uno de los niveles más altos en los países de la OCDE.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Dinamarca, el 82% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Dinamarca obtuvo un resultado de 501 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que elpromedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Dirigir los resultados en el área educativa
En 2012 Dinamarca instauró metas y principios claros relativos a la inclusión de niños con necesidades especiales en la educación regular. Una meta (que el 96% de los estudiantes de escuelas públicas recibieran educación en aulas regulares hacia 2015) se convirtió en un objetivo común por incorporar en la planeación local de la educación y los estudios para los municipios y las escuelas del sistema descentralizado del país.
La reforma Folkeskole (reforma de la educación obligatoria) de 2014 se centró en objetivos relacionados con el rendimiento, la equidad y el bienestar, junto con los indicadores correspondientes. Los avances alcanzados respecto a estos objetivos son monitoreados por cada escuela e informados a los municipios. El financiamiento central para estos últimos también fomenta el desarrollo de la profesión docente. El objetivo es que en 2020 todo profesor cuente con las competencias y calificaciones más vanguardistas requeridas para las materias que imparta.
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svn Educación – Eslovenia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los eslovenos pueden esperar pasar 18.4 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Eslovenia, el 90% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Eslovenia obtuvo un resultado de 504 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Potenciar a los profesores
Los centros de enseñanza secundaria superior de Eslovenia se han reestructurado para promover el liderazgo compartido, las comunidades de aprendizaje y el papel de los profesores como agentes del cambio. Los equipos de desarrollo escolar se organizan para estimular las innovaciones didácticas sostenibles a través de la planificación estratégica, la coordinación y la aplicación en todos los centros. Estos equipos reciben apoyo conceptual y práctico del Instituto Nacional de Educación.
Las innovaciones incluyen un nuevo instituto de agentes del cambio y la creación de programas de investigación y desarrollo profesional. La reforma, que se puso a prueba durante tres años en 10 escuelas, se ha extendido a todas las escuelas secundarias superiores (más de 70 escuelas). Esta reforma se está utilizando como modelo para la aplicación del cambio en otras escuelas del país.
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esp Educación – España más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los españoles pueden esperar pasar cerca de 17.9 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En España, el 63% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra menor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en España obtuvo un resultado menor al promedio de la OCDE en lectura, matemáticas y ciencias. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Centrarse en el bienestar de los estudiantes para obtener mejores resultados
En la región del noroeste de España, Castilla y León, los estudiantes han obtenido resultados sobresalientes en comparación con la media del país. En PISA 2015 obtuvieron una puntuación media alta y solo el 5% de los alumnos obtuvieron resultados bajos en ciencias, lectura y matemáticas, frente al 13% de los alumnos de los países de la OCDE. En 2004, Castilla y León puso en marcha el plan de Entorno Escolar de Aprendizaje, que se centra en el bienestar, incluyendo procedimientos contra el acoso escolar, el reconocimiento a los centros con mejores prácticas y un coordinador de entorno escolar. Casi todos los centros educativos financiados con fondos públicos son supervisados e informan sobre su plan de entorno de aprendizaje dos veces al año. Los resultados de la encuesta de estudiantes de 2007-2008 muestran que el acoso escolar es mucho menor en la región, ya que solo afecta a 1 de cada 40 estudiantes, frente a 1 de cada 26 en el conjunto de España. Castilla y León continúa estos esfuerzos adoptando un enfoque más sistemático, participativo e integrado para actualizar su plan, por ejemplo, introduciendo un plan antiacoso específico.
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usa Educación – Estados Unidos más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los estadounidenses pueden esperar pasar 17.3 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Estados Unidos, el 92% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mucho mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Estados Unidos obtuvo un resultado de 495 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Educación de la cuna a la universidad
Zona Infantil Harlem (HCZ, por sus siglas en inglés) es un conjunto de intervenciones que arrancó a finales de la década de 1990, con el objeto de mejorar los resultados de los niños en el barrio de Harlem de la ciudad de Nueva York. El HCZ se dirige a romper el ciclo de pobreza intergeneracional para niños y familias del Harlem Central a lo largo de un continuo de intervenciones que se extiende durante toda la vida de un niño. El apoyo comienza con el Baby College, serie de talleres para padres de niños de cero a tres años de edad. El Baby College GRADS, una iniciativa más reciente de visitas al hogar, alienta la participación en el programa más amplio al ofrecer servicios atractivos como cuidado infantil gratuito, un sorteo semanal y pañales gratuitos. Continúa con instituciones con programas de educación preescolar de alta calidad que dan servicio a los estudiantes de toda la población de educación primaria y secundaria, programación extraescolar, servicios sociales y programas de salud y desarrollo de la comunidad.
Segundas oportunidades para los desertores escolares
YouthBuild USA es un programa estadounidense de “segundas oportunidades” dirigido a jóvenes entre 16 y 24 años de edad de entornos de ingresos bajos que abandonaron la escuela. Se trata de un programa intensivo (que dura de ocho a 12 meses) que proporciona formación con la construcción, servicios educativos, asesoría y oportunidades de desarrollo de liderazgo.
El programa se ha expandido rápidamente con el tiempo y en la actualidad hay 273 programas YouthBuild en 46 estados, Washington, DC. y las Islas Vírgenes, en los que participan cerca de 10 000 jóvenes adultos al año. Está en proceso una evaluación detallada y rigurosa del programa. Con base en el éxito de los programas YouthBuild USA, el modelo se ha adoptado y reproducido en el mundo entero (YouthBuild International), por ejemplo en Brasil, donde se dirige a jóvenes de 18 a 24 años de edad que viven en el insuficientemente atendido Complexo do Alemão, en Río de Janeiro.
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est Educación – Estonia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los estonios pueden esperar pasar 17.6 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Estonia, el 91% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79% y una de las tasas más altas en los países de la OCDE.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
Estonia es el país de la OCDE con el resultado más alto en lectura, matemáticas y ciencias; el estudiante medio obtuvo un resultado de 526 puntos, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Aprendizaje permanente
La Estrategia de Aprendizaje Permanente 2014-2020 de Estonia establece objetivos cuantificables en áreas como participación en el aprendizaje permanente, número de personas con calificaciones vocacionales, competencias digitales, uso de tecnología digital y oportunidades equitativas. Los avances se miden también con objetivos de resultados en el mercado laboral, así como competencias de matemáticas y lectura. Para lograr estos objetivos será necesario el trabajo conjunto de múltiples programas.
Es demasiado pronto para analizar el éxito de los programas, pues aún están en proceso de desarrollo e implementación. Cada dos años se realizará una encuesta nacional para medir la satisfacción de los beneficiarios. Se calcula que la estrategia impulsará oportunidades de aprendizaje para las personas con un débil desempeño en el mercado laboral. Los planes incluyen cambios en las siguientes áreas: principios de asesoría y evaluación, formación de profesores, contenido y volumen de programas educativos e investigación educativa. El gobierno trabajará en cooperación con los empleadores para ajustar mejor las competencias aprendidas en la escuela a las necesidades de los empleadores. La Ley de Educación para Adultos establece estándares de calidad y aumenta la visibilidad de la capacitación de adultos. También se creó la base jurídica para emprender un sistema coordinado que incluye previsión de competencias futuras y ajuste de estas a las necesidades del mercado laboral.
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rus Educación – Federación Rusa más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los rusos pueden esperar pasar 16.4 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra menor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En la Federación de Rusia, el 95% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mucho mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en la Federación de Rusia obtuvo un resultado de 481 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
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fin Educación – Finlandia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. De manera más concreta, tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los finlandeses pueden esperar pasar 19.8 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 18 años y uno de los niveles más altos de la OCDE.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Finlandia, el 91% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
Finlandia es un país de la OCDE con altos resultados en lectura, matemáticas y ciencias; el estudiante medio obtiene un resultado de 516 puntos, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488.Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Docentes muy respetados
La confianza de que gozan los docentes en la sociedad finlandesa es merecida y refleja la altísima calidad de su formación. Finlandia ha elevado la condición social de sus docentes a un nivel solo superado por muy pocas profesiones. Los docentes universitarios se encuentran entre los profesionales más respetados; incluso, el término con el que se llama al docente se aplica por igual a profesores de nivel escolar básico y a profesores universitarios. En 2010 hubo más de 10 solicitantes por cada uno de los 660 centros universitarios para formar profesores de educación primaria, lo que muestra que la docencia es una de las profesiones más demandadas.
Como resultado de este entorno competitivo, la docencia es ahora una ocupación muy selectiva en Finlandia y en todo el país hay profesores altamente capacitados y formados. Además del respeto hacia los docentes finlandeses, el estatus de la profesión se ha elevado gracias a la combinación de mayores requisitos para entrar en el sector de la docencia, la concesión de mayor autonomía a los profesores en sus aulas y mejores condiciones de trabajo que las que tienen sus colegas en otros lugares. Los docentes se han ganado la confianza de los padres de familia y la sociedad en general por su capacidad demostrada para aplicar criterio y juicio profesionales en el manejo de las aulas y al responder al desafío de ayudar a prácticamente todos los estudiantes a convertirse en alumnos con éxito.
Desde la década de 1980, el sistema finlandés de rendición de cuentas se rediseñó por completo, de abajo arriba. Los candidatos a profesores se seleccionan, en parte, según su capacidad para demostrar su convicción en la misión central de la educación pública en Finlandia, que es profundamente humanista, a la vez que cívica y económica. La preparación que reciben está diseñada para inculcarles un sólido sentido de la responsabilidad individual en cuanto al aprendizaje y el bienestar de todos los estudiantes a su cargo. A lo largo de su carrera deben combinar la función práctica con la investigación. Se espera que los profesores en Finlandia se familiaricen no solo con la base de conocimientos de educación y desarrollo humano, sino que también se les pide elaborar una tesis respaldada por una investigación como requisito final para obtener su título de maestría.
Estimular el emprendimiento
La iniciativa Innolukio estimula el pensamiento creativo y el emprendimiento en el nivel de educación media superior general. Las actividades extraescolares incluyen ejercicios semanales, videos, competencias y materiales de aprendizaje para sustentar la creatividad. Estas experiencias ayudan a los estudiantes a obtener los conocimientos y competencias necesarios para realizar trabajos futuros.
Implementada en un principio como iniciativa local, Innolukio ha crecido y para 2011-2013 incluye 320 escuelas de educación media superior y 110 000 estudiantes. Algunos factores de su éxito son entornos de aprendizaje innovadores, uso activo de promotores, gestión exitosa de la publicidad y focalización en educación emprendedora. El proyecto también conecta a los estudiantes con universidades y empresas.
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fra Educación – Francia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los franceses pueden esperar pasar 16.6 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra menor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Francia, el 81% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor al promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Francia obtuvo un resultado de 494 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Preparar a los jóvenes para el empleo
Las Escuelas para una Segunda Oportunidad francesas ayudan a los adultos jóvenes entre 18 y 25 años de edad a mejorar sus competencias para obtener empleo. Estas escuelas se centran en jóvenes que han estado fuera de la escuela durante más de un año y que no obtuvieron diploma o títulos. Se les ofrecen planes de educación individual para mejorar sus competencias de lectura, matemáticas y TIC. Lo anterior se complementa con la colocación en un empleo para adquirir competencias en el mercado laboral y establecer vínculos fuertes con empleadores.
Las Escuelas para una Segunda Oportunidad se establecieron en 107 zonas locales y para 2015 tenían ya 15 115 estudiantes. Según las evaluaciones, los posibles efectos de largo plazo de estas escuelas sobre la empleabilidad de los jóvenes son prometedores. Durante un periodo de tres años, el 58% de los estudiantes de la zona metropolitana salieron de estas escuelas con una opción para el mercado laboral en capacitación (20%), empleo (17%), práctica profesional (12%) y empleo subsidiado (9%).
Desarrollo del empleo mediante periodos de prácticas profesionales
La Ley de Educación 2013 tiene por objeto duplicar el número de estudiantes que combinan la educación con el empleo para 2020. Los estudiantes de Francia pueden empezar un periodo de prácticas profesionales en diversos niveles, que incluyen educación media superior, educación postsecundaria de dos años, títulos de bachillerato y maestría. Las empresas que ofrecen estas prácticas reciben créditos fiscales y exenciones del seguro social.
Los periodos de prácticas profesionales son ahora más populares, en particular en los niveles de educación terciaria o media superior. Por ejemplo, 75% de los practicantes empleados con un contrat de professionalisation (contrato de profesionalización), similar al de prácticas profesionales para trabajadores de mayor edad y aspirantes, tenían por lo menos un título de educación media superior. En cambio, a los estudiantes jóvenes y trabajadores menos calificados les resulta mucho más difícil tener acceso a estas prácticas. Las prácticas se dirigen solamente a cerca de un tercio de todos los estudiantes en educación secundaria vocacional. Se ha comprobado que las tasas de empleo son más altas para los practicantes que han combinado la formación en una empresa con estudios en un centro de formación profesional que para otros graduados de escuelas vocacionales. El gobierno se propone ampliar el acceso a practicantes de escuelas secundarias vocacionales, en particular en el nivel de educación secundaria, reforzar los vínculos con las empresas y desarrollar mejor orientación para los estudiantes. Es el enfoque correcto para lograr que las prácticas profesionales sean más accesibles para quienes resultarán más beneficiados con ellas.
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grc Educación – Grecia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los griegos pueden esperar pasar 19.2 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Grecia, cerca del 76% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra menor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2015, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Grecia obtuvo un resultado de 453 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
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hun Educación – Hungría más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los húngaros pueden esperar pasar 16.5 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra menor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Hungría, el 86% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Hungría obtuvo un resultado de 479 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
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irl Educación – Irlanda más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los irlandeses pueden esperar pasar cerca de 17.9 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Irlanda, el 85% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Irlanda obtuvo un resultado de 505 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Ayudal al éxito de los alumnos
El plan de Igualdad de Oportunidades en las Escuelas (DEIS) es una política nacional de inclusión educativa. Se dirige a los niños desfavorecidos mediante un sistema estandarizado que identifica el nivel socioeconómico de cada escuela. A continuación, se ofrecen recursos y apoyo a las escuelas, grupos escolares y/o comunidades a través de un Programa de Apoyo Escolar integrado basado en su nivel de necesidad. Las iniciativas incluyen: educación infantil, ratios de alumnos por profesor, profesionalización de los directores y profesores de las escuelas, acceso a un director administrativo, medidas para abordar los déficits de alfabetización y aritmética, financiación adicional para libros y bibliotecas, asesoramiento de orientación y facilitación del acceso a la educación superior.
Los resultados muestran que estas iniciativas han tenido un impacto positivo en los resultados de lectura y matemáticas tanto en las escuelas urbanas como en las rurales. Las tasas de finalización de estudios también aumentaron del 68.2% (para las cohortes de 2001-2007) al 80.1% (para las cohortes de 2006-2012). Está previsto realizar evaluaciones para determinar qué aspectos de la política producen los mejores resultados y mejorar el programa.
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isl Educación – Islandia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los islandeses pueden esperar pasar 18.8 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Islandia, el 76 de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra menor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Islandia obtuvo un resultado de 481 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
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isr Educación – Israel más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los israelíes pueden esperar pasar 15.6 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra menor que el promedio de la OCDE de 18 años y uno de los niveles más bajos en la OCDE.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Israel, el 88% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Israel obtuvo un resultado de 465 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Educación vocacional y formación efectivas
El sistema de educación y formación profesional postsecundaria (VET, por sus siglas en inglés) de Israel es diverso, con resultados relativamente buenos en el mercado laboral para los graduados. Las opciones incluyen estudios técnicos de un año y programas prácticos de ingeniería de dos años, una amplia gama de cursos profesionales más cortos dependientes del Ministerio de Economía y certificaciones profesionales. Estas certificaciones pueden obtenerse a veces al final de un programa educativo, y a veces como un examen independiente.
También hay muchos programas de formación profesional de nivel de licenciatura y superior en las universidades y otras instituciones académicas terciarias. Teniendo en cuenta el abanico de estas diferentes opciones, así como las diversas fuentes del sector privado, y los programas dirigidos a los grupos desfavorecidos, el sistema ofrece opciones para la mayoría de los grupos de clientes relevantes.
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ita Educación – Italia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los italianos pueden esperar pasar 16.7 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra menor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Italia, el 63% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra menor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Italia obtuvo un resultado de 477 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
La reforma Buena Escuela
El gobierno italiano promulgó la reforma Buona Scuola (Buena Escuela) en 2015 con el fin de mejorar la educación secundaria y compartir mejor las oportunidades educativas en todo el país. Esta reforma integral incluye un decreto para implementar un sistema integrado de educación y formación desde el nacimiento hasta los seis años de edad. Otorga también mayor autonomía a las escuelas, instaura una más sólida rendición de cuentas para directores de escuela y en las evaluaciones de los docentes, y ofrece bonos por desempeño para estos últimos. Estas iniciativas se aplican en escuelas que brindan desde educación y atención de la primera infancia hasta educación secundaria.
Coordinada por todos los niveles de gobierno, la reforma se centra en ofrecer igualdad de oportunidades, educación y atención, relaciones y actividades lúdicas, así como en superar la desigualdad en términos territoriales, económicos, étnicos y culturales. También se propone ajustar mejor las competencias de los estudiantes a las necesidades del mercado mediante aprendizaje basado en el trabajo en los tres años finales de educación secundaria. Por otra parte, la reforma incluye iniciativas y un plan nacional de tres años para reforzar las competencias digitales. Se proyecta que estos cambios ejercerán un impacto importante y positivo en el PIB en el largo plazo, con un aumento estimado de 2.6% en el PIB.
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jpn Educación – Japón más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los japoneses pueden esperar pasar 16.4 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra menor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Japón, el número de adultos entre 25 y 64 años de edad que ha terminado la educación media superior es mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
Japón es uno de los países de la OCDE con resultados más altos en lectura, matemáticas y ciencias; el estudiante medio obtiene un resultado de 520 puntos, cifra mucho mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Cambiar prácticas educativas
Después del terremoto de marzo de 2011 en la región de Tohoku, al norte de Japón, los gobiernos nacional, regional y local, en conjunto con la OCDE, emprendieron el Proyecto Escolar OCDE-Tohoku, con el fin de ayudar a estudiantes y profesores de la región a reforzar las competencias del siglo XXI, la internacionalización y la innovación ascendente.
El Proyecto Escolar Tohoku generó un “marco de innovación” abierto caracterizado por un liderazgo distribuido, por el estímulo a la diversidad interna en las iniciativas locales, la experimentación voluntaria con nuevas técnicas pedagógicas y un sentido fortalecido de apego al programa de los participantes. Por ejemplo, en la norteña Fukushima, el proyecto ha empezado a inspirar cambios que implican a aliados externos, como líderes empresariales y aliados internacionales, así como a alentar la cooperación entre las escuelas y las comunidades que las rodean. En la actualidad los docentes trabajan con sus estudiantes y sus comunidades en un problema que amenaza el estilo de vida de los productores agrícolas locales, debido a que los rumores acerca de la contaminación perjudican la venta de alimentos cultivados en la región. Los estudiantes y productores agrícolas trabajaron en conjunto en pos de una solución, y decidieron producir una jalea de frutas, la cual se ha vendido bien en todo el país. Para los agricultores, esto ha representado un nuevo futuro y esperanza, en tanto que a los estudiantes les ha facilitado un cambio del estudio académico enfocado en exámenes al emprendimiento, el pensamiento crítico, la creatividad y el compromiso con la comunidad.
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lux Educación – Luxemburgo más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los luxemburgueses pueden esperar pasar cerca de 15 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra mucho menor que el promedio de la OCDE de 18 años y uno de los niveles más bajos de la OCDE.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Luxemburgo, el 74% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra menor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Luxemburgo obtuvo un resultado de 477 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
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mex Educación – México más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los mexicanos pueden esperar pasar 15.4 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra mucho menor que el promedio de la OCDE de 18 años y el nivel más bajo en la OCDE.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En México, el 42% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mucho menor que el promedio de la OCDE de 79% y una de las tasas más baja de los países de la OCDE.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en México obtuvo un resultado de 416 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra mucho menor que el promedio de la OCDE de 488 y una de las tasas más baja de la OCDE. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Reformar la educación
En los últimos años, México ha puesto en marcha varias reformas para mejorar los logros y resultados educativos. Estas reformas han dado prioridad a un plan de estudios orientado a las competencias, a la profesionalización de los educadores y han hecho que el sistema de evaluación y valoración sea más transparente y responsable.
México ha introducido la obligatoriedad de la educación a tiempo completo para todos los niños de 4 a 15 años y aspira a la cobertura universal para 2022. Para apoyar esta transición, México ha promovido un Programa de Escuelas de Tiempo Completo, que debería estar plenamente implantado en 2018. Se espera que el programa llegue a 40 000 escuelas y beneficie a unos cinco millones de estudiantes.
Aunque es comparativamente bajo para los países de la OCDE, el nivel educativo y los resultados de México han mejorado desde el año 2000. Las tasas de matriculación entre los jóvenes de 15 a 29 años aumentaron del 42% al 53% en 2012. Las tasas de graduación en secundaria superior aumentaron en 14 puntos porcentuales durante el mismo periodo. Desde 2003, los resultados de PISA en matemáticas también han mejorado entre los y las jóvenes en 30 y 26 puntos respectivamente.
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nor Educación – Noruega más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los noruegos pueden esperar pasar 18.4 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Noruega, el 82% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Noruega obtuvo un resultado de 497 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Facilitar el acceso a la atención y educación de la primera infancia
Noruega ha puesto en marcha diversas reformas para ayudar a los padres de familias de ingresos bajos a registrar a sus hijos en el jardín de niños, con lo que ofrece a los niños pequeños un mejor acceso a la atención y educación de la primera infancia (AEPI). La reforma de 2004-2009 implementó primero una regulación por la que las cuotas de todos los jardines de niños bajarían 35% para 2014. Entre 2004 y 2012, la participación de los niños de 1a5 años de edad en la AEPI aumentó considerablemente.
En 2015, mediante una nueva regulación se bajaron las cuotas a un máximo de 6% del ingreso familiar para las familias de ingresos bajos; así, se redujeron las colegiaturas para las familias necesitadas, en tanto que las de ingresos más altos pagaban la cuota máxima. Esto se acompañó del derecho a 20 horas de servicio de jardín de niños gratuito para niños de 3 a 5 años de edad de familias desfavorecidas.
Aún no se evalúan plenamente estos cambios, pero se ha observado que el número de años de estudio en el jardín de niños se relaciona con las calificaciones de los niños en las pruebas de lectura del primer grado. Entre los niños con por lo menos cuatro años de jardín de niños, solo el 15% obtuvo calificaciones bajas, en comparación con cerca del 40% de los niños de 0-2 años en AEPI. La disponibilidad de AEPI gratuita 20 horas por semana aumentó la participación de niños de lengua minoritaria en 15% y ya ha generado mejores resultados en las pruebas de asociación de los grados primero y segundo en comparación con los que no participaron en el programa. Estos logros iniciales sugieren que los resultados seguirán mejorando en el caso de los niños de familias desfavorecidas.
Formación de líderes escolares
En 2009 Noruega puso en marcha un programa de formación y desarrollo de liderazgo para mejorar la eficacia de los líderes escolares. El programa brinda formación a estos líderes, dando prioridad a quienes han ocupado su puesto durante menos de dos años. La formación se centra en cinco áreas clave: resultados y entorno de aprendizaje del estudiante; gestión y administración; cooperación y desarrollo organizacional; desarrollo y cambio, y la función de liderazgo. Con base en la experiencia y en evaluaciones del programa, ahora se cuenta con una mayor participación de los proveedores y propietarios de las escuelas y de las organizaciones de líderes escolares, con una mayor integración de la formación en competencias y con un mayor intercambio de conocimientos entre los participantes.
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nzl Educación – Nueva Zelanda más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los neozelandeses pueden esperar pasar 17.5 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Nueva Zelanda, el 81% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio de Nueva Zelanda obtiene un resultado de 503 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Redes para mejorar los resultados
La estrategia de Redes de Aprendizaje y Cambio reúne a escuelas, kuras (escuelas de inmersión en lengua maorí), comunidades, proveedores profesionales y funcionarios del ministerio para mejorar la escolarización, el aprendizaje mixto y la capacidad de respuesta cultural. La estrategia, que se puso a prueba por primera vez en 2012 con cinco redes que representaban a 45 escuelas y kuras, incluye ahora unas 55 redes en las que participa alrededor de una quinta parte de todas las escuelas y kuras. Al eliminar silos, en lugar de crearlos, estas redes acercan a Nueva Zelanda a la consecución de los objetivos de rendimiento de los estudiantes. Uno de los principales objetivos es lograr que los jóvenes de 18 años obtengan casi universalmente el Certificado Nacional de Educación de Nivel 2 para 2021.
Nuevas funciones docentes
Para mejorar el rendimiento de todos los estudiantes, Nueva Zelanda introdujo en 2015 cuatro nuevas funciones dentro de las escuelas: Director Ejecutivo, Profesor Experto, Profesor Líder y Director de Cambio. Estas funciones ofrecen a los profesores oportunidades de progreso en el aula y constituyen un medio para compartir conocimientos en todo el sistema escolar. Cada una de estas funciones ofrece una importante remuneración adicional por un periodo de tiempo determinado (a excepción de los profesores jefe, que son permanentes) y contribuye a reconocer a los profesores y directores más eficaces. Las funciones se basan en normas profesionales.
Las comunidades de escuelas trabajan juntas para identificar y esforzarse por alcanzar objetivos específicos. Cada comunidad de escuelas tiene un director ejecutivo y una asignación de profesores expertos y líderes.
Además de estas nuevas funciones, todas las escuelas reciben financiación adicional para proporcionar tiempo libre en el aula, de modo que los profesores puedan trabajar con los profesores expertos y líderes en la práctica profesional.
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nld Educación – Países Bajos más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los neerlandeses pueden esperar pasar 18.8 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra ligeramente mayor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En los Países Bajos, el 81% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en los Países Bajos obtiene un resultado de 502 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Promover la evaluación por pares y la planificación colaborativa del trabajo en la escuela
La Fundación leerKRACHT (profesor en neerlandés), establecida en 2012, pone en marcha un programa ascendente de desarrollo de capacidad para escuelas y reestructura la política educativa nacional. La fundación ayuda a las escuelas a crear una cultura de mejora continua para docentes, en la que estos trabajan juntos para optimizar la calidad de su enseñanza y los líderes escolares sirven como modelo. El objetivo es llegar en 2020 a más de 5 000 escuelas primarias y secundarias neerlandesas (de un total de 8 700 escuelas).
Los profesores y administradores escolares que participan en el programa trabajan estrechamente con el fin de mejorar la educación en las escuelas. Son tres los procesos centrales para el programa: observación del aula y retroalimentación; planificación conjunta de las clases, y “sesiones de pizarrón”. La concepción de estas últimas se basa en el movimiento LEAN ocurrido en la industria de la manufactura, en la que a diario pequeños equipos sostienen juntas informales de pie buscando mejorar la calidad en conjunto. El enfoque es apoyado con foros sostenidos con las escuelas de la Fundación leerKRACHT de la región y con visitas a empresas con una cultura de mejora continua. Esta iniciativa privada ahora cuenta con la participación de una de cada 10 escuelas secundarias de los Países Bajos, una de cada tres escuelas de formación vocacional y cientos de escuelas primarias.
Mantener a los jóvenes en la escuela
Países Bajos ha tomado medidas para ayudar a estudiantes en riesgo o que han abandonado recientemente la escuela a concluir sus estudios. Se pusieron en marcha las “cifras educativas” individuales, una Oficina nacional para el Ausentismo Escolar y centros de registro y coordinación regional para llevar un mejor registro y brindar apoyos a estudiantes en riesgo.
El programa Aanval op schooluitval apoya a los jóvenes en la transición de la educación secundaria prevocacional a la vocacional con una mejor cobertura de sus necesidades. Las mejoras incluyen más oportunidades para el aprendizaje práctico, apoyo en orientación vocacional y diversos planes de estudio con deportes y cultura. Las recompensas financieras ofrecidas alientan a las escuelas a reducir las tasas de deserción. El programa también negocia con diversos empleadores los requisitos básicos de cualificación para los jóvenes que abandonan la escuela a una edad temprana, entre 18 y 23 años.
En conjunto, estas iniciativas han bajado el número de deserciones casi por la mitad, de más de 50 000 en el año escolar 2005/2006 a alrededor de 28 000 en el año escolar 2012/2013.
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pol Educación – Polonia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los polacos pueden esperar pasar 17.6 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Polonia, el 93% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mucho mayor que el promedio de la OCDE de 79% y una de las tasas más altas en los países de la OCDE.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Polonia obtuvo un resultado de 513 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Mejorar la calidad de la educación
Gracias a las reformas educativas, la clasificación de Polonia en el Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) de la OCDE ha mejorado considerablemente desde el año 2000. Los resultados del país, que en un principio estaban por debajo de la media, aumentaron gradualmente hasta situarse por encima de la media en todas las asignaturas en 2009. No solo se redujo el número de estudiantes con bajo rendimiento y aumentó el de los de alto rendimiento, sino que también se redujeron las variaciones de rendimiento entre escuelas.
Las evaluaciones muestran que las reformas clave para alcanzar estos resultados positivos fueron: retrasar el seguimiento en las ramas profesionales, ofrecer más horas de enseñanza de idiomas, introducir exámenes evaluados externamente al final de cada etapa educativa, cambiar la estructura salarial de los profesores y descentralizar el desarrollo de los planes de estudio a nivel local (manteniendo los estándares a nivel nacional). Este ejemplo de buenas prácticas para mejorar los resultados educativos podría ayudar a otros países a reformar sus sistemas educativos.
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prt Educación – Portugal más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los portugueses pueden esperar pasar 17 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra cercana al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Portugal, el 55% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mucho menor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Portugal obtuvo un resultado de 492 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
“Conglomerados de escuelas” para obtener mejores resultados en todas las regiones "
Las deficiencias del sistema educativo de Portugal salieron a la luz después de publicarse los resultados del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE de 2000. Los retos principales se concentraban en las escuelas primarias de zonas rurales, y en los pueblos y las ciudades muchas escuelas estaban saturadas, lo cual ejercía gran presión sobre los profesores. Los limitados recursos y la carga para las escuelas provocaban que muchos estudiantes de grupos desfavorecidos repitieran grados e incluso abandonaran la escuela.
Tras un debate nacional sobre la mejor manera de cubrir las necesidades de los estudiantes y los docentes, se realizaron profundas reformas. Una de las más exitosas fue la creación de conglomerados de escuelas, que reúnen de cinco a diez escuelas bajo un único proyecto educativo. Mediante una labor conjunta, el Ministerio de Educación y los municipios desarrollan conglomerados considerando las características singulares y específicas relacionadas con el tamaño de las escuelas, las necesidades de los estudiantes, así como factores geográficos y demográficos. Al ampliar el número de empleados e instalaciones disponibles, los conglomerados escolares han ayudado a mejorar los servicios y el apoyo que se ofrecen a los estudiantes.
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gbr Educación – Reino Unido más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los británicos pueden esperar pasar 16.8 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra menor del promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En el Reino Unido, el 82% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en el Reino Unido obtuvo un resultado de 503 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Iniciativas locales mejoran las competencias de los jóvenes
Made in Sheffield (Hecho en Shefield) es un proyecto local que ayuda a los estudiantes a adquirir las competencias que los empleadores necesitan y desean. Los estudiantes participantes pueden tener acceso a ensayos de empleo, clases, aprendizaje con base en proyectos, periodos de prácticas profesionales y empleo parcial mientras asisten a la escuela. Un Pasaporte de Competencias los ayuda a centrarse en las competencias que los empleadores afiliados buscan, como competencias técnicas de alto nivel. En el año escolar 2013/2014 se añadieron cuatro nuevos sectores al programa junto con 150 estudiantes embajadores.
Muchos estudiantes que participan en el proyecto mejoraron y diversificaron sus conocimientos y competencias. Por ejemplo, las jóvenes representan el 55% de los estudiantes matriculados en informática, en comparación con una tasa de menos del 10% en la industria, y cerca del 50% de los estudiantes inscritos en ingeniería y manufactura. Los jóvenes varones también están diversificando sus competencias y el 50% está en el Hospital Universitario Sheffield. Según las evaluaciones, los estudiantes están muy satisfechos y tienen más probabilidades de encontrar empleo o puestos para prácticas profesionales después de concluir el programa.
La Campaña de Periodos de Prácticas Profesionales del Alcalde de Londres, en conjunto con el Servicio Nacional de Prácticas Profesionales, crearon más de 170 000 prácticas profesionales en Londres entre 2010 y 2014. En 2015 el alcalde duplicó (de £1 500 a £3 000), el financiamiento para el Subsidio de Prácticas Profesionales para Empleadores y anunció la implementación de un fondo para pequeñas y medianas empresas.
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cze Educación – República Checa más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los checos pueden esperar pasar 17.8 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En la República Checa, cerca del 94% los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mucho mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en la República Checa obtuvo un resultado de 495 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
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svk Educación – República Eslovaca más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los eslovacos pueden esperar pasar 15.7 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra menor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En la República Eslovaca, el 92% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mucho mayor que el promedio de la OCDE de 79% y una de las tasas más altas en los países de la OCDE.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en la República Eslovaca obtuvo un resultado de 469 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Reforzar los vínculos entre las escuelas y las empresas
Las escuelas secundarias de la República Eslovaca suelen tener una orientación de formación vocacional, aunque algunas veces aislada del mercado laboral. Una reforma a la educación y formación vocacional (EFP) realizada en 2015 instauró un sistema dual basado en una estrecha colaboración entre los empleadores y las escuelas de formación vocacional.
De conformidad con este sistema, los empleadores cubren los costos de la capacitación en el sitio de trabajo, en tanto que las escuelas conservan la responsabilidad de enseñar materias teóricas y generales. Para alentar a los empleadores a ofrecer una experiencia de alta calidad a los estudiantes y para ajustar mejor las competencias requeridas y la educación, se pusieron en marcha diversos mecanismos de incentivos y control. Algunos de ellos son exenciones fiscales por estudiante para los empleadores; influencia directa del empleador en el contenido educativo en el nivel escolar; certificación para empleadores que ingresan al sistema dual para confirmar su capacidad de proporcionar capacitación, así como control de los procesos educativos y de formación en el sitio de trabajo por parte de empleados asignados de la escuela asociada, y control externo por parte de la Inspección Estatal.
Estas iniciativas para apoyar un aprendizaje más práctico mediante experiencias más basadas en el trabajo son un paso en la dirección correcta para ajustar mejor las competencias de los estudiantes a las necesidades del mercado laboral. Tras el monitoreo y la evaluación en los próximos años, se planea emprender otras medidas en consulta con todas las partes.
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swe Educación – Suecia más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los suecos pueden esperar pasar 19.7 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 18 años y uno de los niveles más altos en la OCDE.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Suecia, el 84% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Suecia obtuvo un resultado de 503 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Mejorar la tasa de conclusión de la educación media superior sueca
El programa nacional Plug In tiene como objetivo reducir a la mitad el nivel de abandono escolar que no termina el segundo ciclo de secundaria, del 24% al 12% para 2017. Plug In opera a través de más de 100 proyectos a nivel local o regional, para atender a las necesidades específicas de los estudiantes en riesgo en diferentes comunidades. La Asociación Sueca de Autoridades Locales y Regiones lo coordina a nivel nacional.
Por ejemplo, algunos proyectos ofrecen a los estudiantes apoyo individual y tutoría, apoyo a la salud mental y enlaces a servicios especializados. Las estrategias más amplias hacen hincapié en la mejora de los sistemas y procesos y en la oferta de educación para adultos. Actualmente se están realizando evaluaciones para determinar el éxito de estos esfuerzos coordinados.
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che Educación – Suiza más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los suizos pueden esperar pasar 17.5 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra casi coincidente al promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Suiza, el 89% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 79%.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Suiza obtuvo un resultado de 498 puntos en lectura, matemáticas y ciencias, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Ayudar a los estudiantes a concluir su educación
Las tasas de abandono universitario en Suiza son elevadas (en torno al 30%), con una sobrerrepresentación de los estudiantes que terminaron el bachillerato en determinados cantones y entre los estudiantes extranjeros. Esto sugiere que la calidad de la educación secundaria es inferior en estos cantones. Por ello, se introdujo un acuerdo intercantonal para armonizar las becas para la enseñanza secundaria superior y la terciaria. Se espera que esta reforma ayude a los estudiantes desfavorecidos a terminar el bachillerato y a acceder a la enseñanza superior.
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tur Educación – Turquía más
Aspectos clave
Una población bien educada y bien capacitada es esencial para el bienestar social y económico de un país. La educación desempeña un papel fundamental para proporcionar a las personas los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para participar de manera efectiva en la sociedad y en la economía. Tener una buena educación mejora en gran medida la probabilidad de encontrar empleo y de ganar suficiente dinero. Los turcos pueden esperar pasar 18.7 años en el sistema educativo entre los 5 y los 39 años de edad, cifra ligeramente mayor que el promedio de la OCDE de 18 años.
Obtener un título de educación media superior cobra una creciente importancia en todos los países, ya que las competencias necesarias en el mercado laboral se basan cada vez más en los conocimientos. Por consiguiente, las tasas de graduación del bachillerato indican con claridad si un país está preparando a sus estudiantes para cubrir los requerimientos mínimos de ese mercado laboral. En Turquía, el 42% de los adultos entre 25 y 64 años de edad ha terminado la educación media superior, cifra mucho menor que el promedio de la OCDE de 79% y una de las tasas más bajas en los países de la OCDE.
Pero las tasas de graduación, si bien son importantes, no son indicadores precisos de la calidad de la educación recibida. El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE analiza hasta qué punto los estudiantes han adquirido algunos de los conocimientos y las competencias que resultan esenciales para participar de manera plena en las sociedades modernas. En 2018, PISA se concentró en examinar la capacidad de lectura, las habilidades en matemáticas y el nivel en ciencias, puesto que la investigación muestra que estas competencias son indicadores más confiables del bienestar económico y social que el número de años dedicados a ir a la escuela.
El estudiante medio en Turquía obtuvo un resultado de 462 puntos en lectura, matemáticas y ciencias,cifra menor que el promedio de la OCDE de 488. Los sistemas escolares con mejores resultados logran brindar educación de alta calidad a todos los estudiantes.
Mejores políticas para una vida mejor
Mejorar la igualdad en las calificaciones de PISA
El rendimiento de Turquía en matemáticas, lectura y ciencias ha mejorado notablemente desde que participó por primera vez en PISA en 2003, cuando Turquía estaba entre los países de la OCDE con peor rendimiento. Por ejemplo, la puntuación media en matemáticas pasó de 423 puntos en 2003 a 448 puntos en 2012, una mejora equivalente a más de medio año de escolarización.
Gran parte de esta mejora se concentró entre los alumnos con mayores necesidades socioeconómicas y educativas. El motor inicial de estas mejoras fue el Programa de Educación Básica (PEB), lanzado en 1998, que incluía una ley de educación obligatoria. Desde la puesta en marcha de este programa, la tasa de asistencia entre los alumnos de primaria aumentó de alrededor del 85% a casi el 100%, mientras que la tasa de asistencia en los programas de preescolar aumentó del 10% al 25%.
Varios proyectos ejecutados en la última década también han abordado cuestiones de equidad. Entre ellos, la campaña Girls to Schools Now (Las niñas a la escuela ya), que pretende garantizar que todas las niñas de entre 6 y 14 años asistan a la escuela primaria; un registro para identificar a los niños no escolarizados; el programa Educación con Transporte, que beneficia a los alumnos que no tienen acceso a la escuela; y el Programa de Formación Transitoria Complementaria, que intenta garantizar que los jóvenes de entre 10 y 14 años adquieran una educación básica aunque nunca hayan estado matriculados en una escuela o hayan abandonado los estudios.
Avances tecnológicos en la educación
Los estudiantes de Turquía pueden esperar tener clases totalmente informatizadas en 2017. El proyecto FATIH, puesto en marcha en 2010, equipará a 42 000 escuelas y 570 000 clases con las últimas tecnologías educativas. Entre ellas se encuentran las tabletas, las pizarras interactivas y la Internet de alta velocidad. Para aprovechar al máximo estos cambios, 800 000 profesores recibirán formación continua sobre el uso educativo de estas tecnologías y se desarrollarán contenidos electrónicos para cada curso.
En septiembre de 2014, el proyecto FATIH ya había proporcionado 732 800 tabletas, 432 288 pizarras interactivas, 45 653 impresoras y cámaras de documentos, y una infraestructura de Internet de alta velocidad a 3 362 escuelas. Hasta el momento, 105 000 profesores han recibido formación continua y se puede acceder a diversos recursos educativos a través de un nuevo portal web de contenidos electrónicos (www.eba.gov.tr). Una vez finalizada la implantación, el proyecto FATIH se someterá a una evaluación de la satisfacción de alumnos y profesores, así como del uso de las nuevas tecnologías educativas.
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