Vivienda

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Letonia, las familias gastan en promedio casi 21% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Letonia, el hogar promedio tiene 1.2 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 88.8% de las viviendas en Letonia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, una de las tasas más bajas de la OCDE, cuyo promedio es de 97%. 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Sudáfrica, las familias gastan en promedio el 18% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra menor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Sudáfrica, el hogar promedio tiene menos habitaciones por persona que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, solo el 64% de las viviendas en Sudáfrica tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra considerablemente menor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Alemania, las familias gastan en promedio el 20% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra que coincide con el promedio de la OCDE.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Alemania, el hogar promedio tiene 1.8 habitaciones por persona, cifra que coincide globalmente con el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, casi cada vivienda (99.9%) en Alemania tiene acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, en comparación con el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Australia, las familias gastan en promedio más de 19% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra que coincide globalmente con el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de la vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el número promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Australia, el hogar promedio tiene un número mayor de habitaciones por persona que el promedio de la OCDE de 1.7. En términos de servicios básicos, el porcentaje de viviendas de Australia que tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua es mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Austria, las familias gastan en promedio alrededor de 21% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra ligeramente mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Austria, el hogar promedio tiene 1.6 habitaciones por persona, cifra ligeramente menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 99.3% de las viviendas en Austria tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Mejores políticas para una vida mejor

Buena vivienda

Los habitantes de Austria disfrutan de un estándar de vivienda relativamente alto. Tienen un promedio de cerca de 1.6 habitaciones por persona, lo que cubre bastante bien sus necesidades de espacio para vivir. Solo el 1% de la población reside en viviendas que carecen de instalaciones sanitarias básicas.

Además, se puede obtener una vivienda a precio accesible, debido a que para ello hay considerables subsidios, existe un mercado de vivienda de tipo social y bajo el modelo de cooperativa, y las rentas en el mercado privado están sujetas a un extenso control. La gente dedica alrededor del 21% de su ingreso disponible a la vivienda, cifra que coincide con el promedio de la OCDE. Sin embargo, es mucho más probable que quienes se encuentran por debajo del umbral de pobreza relativa vivan en lugares sobrepoblados, ocupen viviendas de poca calidad y/o estén agobiados por sus costos. Al parecer, la población que tiene antecedentes de migración se halla en particular desventaja. Sin embargo, recientemente se han mejorado las condiciones de vida de los inmigrantes, por ejemplo, facilitándoles el acceso a vivienda de tipo social.

 

Recursos adicionales

• How's Life? 2015: Measuring Well-being

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Brasil, el hogar promedio tiene un número de habitaciones por persona menor que el promedio de la OCDE de 1.7. En términos de servicios básicos, 93.3% de las viviendas en Brasil que tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, una cifra menor que el promedio de la OCDE de 97%.

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Bélgica, las familias gastan en promedio el 20% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra equivalente al promedio de la OCDE.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Bélgica, el hogar promedio tiene 2.1 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona y una de las tasas más altas en la Organización. En términos de servicios básicos, el 99.3% de las viviendas en Bélgica tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Canadá, las familias gastan en promedio el 23% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Canadá, el hogar promedio tiene 2.6 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona y la tasa más alta en la Organización. En términos de servicios básicos, casi todas las viviendas (99.8%) en Canadá tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Mejores políticas para una vida mejor

Rentas más accesibles

En la década de 2000, los gobiernos municipales de algunas ciudades, como Toronto y Vancouver, rezonificaron todas las áreas unifamiliares para permitir que las personas dieran en alquiler habitaciones secundarias o en sótanos dentro de sus propiedades, o bien laneway houses, a fin de incrementar la oferta de rentas accesibles. Las laneway houses son pequeñas viviendas o habitaciones independientes construidas en el patio trasero de una propiedad unifamiliar y que cuentan con su propia entrada. Aunque antes ya se rentaban habitaciones secundarias, en muchos casos era sin autorización, o de manera ilegal.

El apoyo a este tipo de espacios ha sido parte importante de la estrategia de Vancouver para facilitar el acceso a la vivienda, ya que sus rentas tienden a ser más bajas. Al tiempo que esto ha incrementado la oferta de alquileres más baratos, ayuda a los propietarios a pagar sus créditos hipotecarios, así como a enriquecer la diversidad social en los vecindarios unifamiliares. Además, dado que muchas habitaciones secundarias tienen salida a un patio, podrían ser más atractivas para las familias que los apartamentos convencionales que se rentan. Estas ventajas indican que valdría la pena que otras ciudades con escasez de viviendas de alquiler accesibles legalizaran las habitaciones secundarias y las laneway houses en todas las áreas unifamiliares, aunque en muchas municipalidades canadienses la resistencia de los propietarios haya sido un gran obstáculo para tales cambios.

 

Recursos adicionales

• How's Life? 2015: Measuring Well-being

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Chile, las familias gastan en promedio el 18% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra menor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Chile, el hogar promedio tiene 1.9 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 90.6% de las viviendas en Chile tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra menor que el promedio de la OCDE de 97%.

Mejores políticas para una vida mejor

Diversificar y mejorar la vivienda

Chile ha emprendido medidas concretas para mejorar las condiciones de vida de los grupos de población más vulnerables. El Programa de Recuperación de Condominios Sociales permite a los propietarios de complejos de viviendas que ya no es posible mejorar o reparar, transferirlos al Servicio de Vivienda y Urbanismo a cambio de un subsidio para vivienda. Posteriormente los residentes pueden comprar una vivienda que esté en buenas condiciones. Así, el gobierno recupera el terreno para desarrollar proyectos de renovación urbana.

Entre 280 000 y 344 000 familias son elegibles para el Programa de Regeneración de Condominios Sociales, el cual mejora la calidad de los complejos que se encuentran deteriorados, pero factibles de recuperarse. Se asigna financiación para cada familia que forme parte de un proyecto de mejora, y los solicitantes hacen también una pequeña aportación.

Chao Suegra es un programa de subsidio de arriendo de vivienda para ayudar a jóvenes adultos a comprar su propio hogar. El programa arrancó en 2014 con una cuota de 5 000 solicitantes, limitada a jefes de hogar de 18 a 30 años de edad. Se ofrece a los solicitantes ayuda por hasta CLP 200 000 (cerca de USD 360) durante un periodo de cinco años. El primer grupo de solicitantes estuvo compuesto por un 82% de mujeres y un tamaño medio de familia de 2.6 miembros de 26 años, con un pago medio de renta de 304 000 (alrededor de USD 550).

Apoyar el arriendo privado de viviendas en Chile

En Chile un pequeño porcentaje (16%) de familias habitan viviendas rentadas, en comparación con el 20% de otros países de la OCDE, y el sector de arriendo privado chileno atiende más a familias con ingresos altos que a las de ingresos bajos, en oposición a lo que sucede en la mayoría de los países de la OCDE. Probablemente esto se deba en parte a la política de vivienda adoptada por el país durante las últimas décadas, que ha apoyado el acceso a la propiedad de la vivienda a las familias de ingresos bajos y medios, pero sin brindar apoyo al sector de arriendo.

Un mayor acceso a la vivienda arrendada para familias de ingresos bajos y medios puede ayudar a mejorar la movilidad residencial y reducir la segregación en este sentido. En 2013, Chile introdujo un programa piloto de subsidio de arriendo, el cual ofrece cupones de arriendo para familias jóvenes, sujetos a la condición socioeconómica. El cupón cubre un pago único y total, hecho directamente al arrendador, por un periodo limitado a cinco años. El subsidio permite el cambio por reubicación y brinda alguna flexibilidad de pagos para evitar desahucios ante una pérdida temporal de ingresos. Este programa es un buen inicio para una política habitacional con una postura más neutral respecto a la propiedad de la vivienda en Chile; sin embargo, es conveniente considerar acciones que apoyen la oferta de viviendas para arriendo privadas y de buena calidad, pero también de tipo social.

 

Recursos adicionales

• How's Life? 2015: Measuring Well-being

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Corea, las familias gastan en promedio el 15% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda,  lo que representa el nivel más bajo de la OCDE, donde el promedio es de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Corea, el hogar promedio tiene 1.5 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 97.5% de las viviendas en Corea tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra ligeramente mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Dinamarca, las familias gastan en promedio el 23% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Dinamarca, el hogar promedio tiene 1.9 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 99.5% de las viviendas en Dinamarca tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Mejores políticas para una vida mejor

Vivienda digna en la vejez

Los beneficios de vivienda de Dinamarca ayudan a los pensionados a mantener un nivel de vida digno al entrar en la vejez. El beneficio no toma en cuenta el patrimonio con el que cuenten y son elegibles incluso pensionados que son propietarios de su propia casa. Si el beneficiario posee su casa, el complemento se ofrece como préstamo, el cual deberá retribuirse si el inmueble se vende. El máximo beneficio para los pensionados ancianos llegó a kr44 844 al año en 2015, en comparación con el beneficio estándar de kr41 928.

Los pensionados ancianos pueden también calificar para un complemento separado para calefacción. Este está sujeto al nivel de ingresos, excluido el patrimonio, para asegurarse de apoyar a quienes más lo necesitan. En 2013, cerca de 290 000 pensionados ancianos recibieron el beneficio de vivienda y 167 000, el de calefacción.

 

Recursos adicionales

• How's Life? 2015: Measuring Well-being

 

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Eslovenia, las familias gastan en promedio el 18% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra menor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Eslovenia, el hogar promedio tiene 1.6 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. Sin embargo, en términos de servicios básicos, casi todas las viviendas (99.8%) incluidas en la muestra en Eslovenia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En España, las familias gastan en promedio casi 22% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En España, el hogar promedio tiene 1.9 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, casi todas las viviendas (99.9%) incluidas en la muestra en España tienen acceso privado a un inodoro interior con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Estados Unidos, las familias gastan en promedio el 18% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra menor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Estados Unidos, el hogar promedio tiene 2.4 habitaciones por persona, cifra mucho mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, casi cada vivienda (el 99.9%) incluida en la muestra en Estados Unidos tiene acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Mejores políticas para una vida mejor

Vivienda social para los ancianos

Se espera que el número de ancianos que viven en Estados Unidos se duplique para 2030. La mayoría de los ancianos que viven en zonas rurales habitan hogares unifamiliares y les resulta difícil tener acceso a servicios de atención médica y social adecuados.

El gobierno puso en marcha un programa de vivienda social para ancianos que habitan zonas rurales, para ayudar a proporcionar a los ancianos de ingresos bajos y medianos condiciones de vida adecuadas y asequibles. El programa de Vivienda y Desarrollo (HUD) Sección 2 ofrece a los ancianos de bajos ingresos opciones para vivir de manera independiente y, a la vez, tener acceso a apoyo cuando lo necesiten. Los patrocinadores pueden recibir adelantos de capital sin intereses para desarrollar alojamiento supervisado. No se requiere a los patrocinadores participantes que devuelvan estos anticipos, siempre y cuando sirvan a ancianos de ingresos bajos por lo menos durante 40 años. El costo restante del proyecto de asistencia para arriendo que no es cubierto por la renta pagada por los arrendatarios y costos de operación de HUD se cubren con fondos de ayuda para arriendos.

El principal éxito del programa es que permite a los ancianos mantener su independencia viviendo en su propio hogar más tiempo de lo que hubieran podido hacerlo de otra manera. La baja reciente en el número de unidades asignadas mediante este programa deberá revertirse para seguir apoyando las necesidades de la población de edad mayor.

 

Recursos adicionales

• How's Life? 2015: Measuring Well-being

 

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Estonia, las familias gastan en promedio el 17% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra menor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Estonia, el hogar promedio tiene 1.7 habitaciones por persona, cifra equivalente al promedio de la OCDE. En términos de servicios básicos, el 94.3% de las viviendas en Estonia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, una cifra menor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En la Federación de Rusia, las familias gastan en promedio alrededor de 17% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra menor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En la Federación de Rusia, el hogar promedio tiene 1 habitación por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 86.2% de las viviendas en la Federación de Rusia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra considerablemente menor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Finlandia, las familias gastan en promedio el 23% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Finlandia, el hogar promedio tiene 1.9 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 99.6% de las viviendas en Finlandia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

              Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler (o pagos de créditos cuando se compra una casa propia), gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Francia, las familias gastan en promedio el 21% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra ligeramente mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

              Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Francia, el hogar promedio tiene 1.8 habitaciones por persona, cifra que coincide globalmente con el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 99.5% de las viviendas en Francia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

 Mejores políticas para una vida mejor

Fomentar el ahorro para vivienda

El Compte épargne lodgement, o Plan de Ahorro para Vivienda, ofrece subsidios estatales y planes de ahorro libres de impuestos para estimular a las personas a ahorrar para comprar una vivienda. Los planes funcionan en forma de contrato y las personas pueden elegir entre dos tipos. La primera opción les permite obtener un crédito que incluya un bono del gobierno nacional después de 18 meses. Con el segundo tipo de plan, las personas pueden calificar para un bono, así como para un crédito a una tasa por debajo del mercado después de cuatro años. La tasa depende de la tasa de interés acumulado al final de su periodo de ahorro. Las personas que se beneficien de cualquiera de los planes pueden depositar y retirar de su cuenta con libertad un límite de EUR 90 000. Los créditos han sido especialmente útiles para apoyar a propietarios de viviendas si se les utiliza en conjunto con otros créditos. 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler (o pagos de créditos cuando se compra una casa propia), gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Grecia, las familias gastan en promedio el 22% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Grecia, el hogar promedio tiene 1.2 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 99.6% de las viviendas en Grecia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Hungría, las familias gastan en promedio el 20% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra equivalente al promedio de la OCDE.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Hungría, el hogar promedio tiene 1.4 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 96.5% de las viviendas en Hungría tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra ligeramente menor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Irlanda, las familias gastan en promedio el 21% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra que coincide globalmente con el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Irlanda, el hogar promedio tiene 2.1 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, casi todas las viviendas (el 99.8%) en Irlanda tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Islandia, el hogar promedio tiene 1.6 habitaciones por persona, cifra ligeramente menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 100% de las viviendas incluidas en la muestra en Islandia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, en comparación con el promedio de la OCDE de 97%.

Mejores políticas para una vida mejor

Vivienda asequible para familias de bajos ingresos

El déficit entre la oferta y la demanda de vivienda ha propiciado el alza de los precios de esta en Islandia, lo cual afecta en particular la asequibilidad del alquiler privado para las familias de bajos ingresos. Para reequilibrar el mercado mediante el freno a la demanda y ayudar a las familias vulnerables, el gobierno puso en marcha una reforma que limita la capacidad del Fondo de Financiamiento de la Vivienda de autorizar nuevos créditos en 2016, en tanto que modificó las políticas públicas para proporcionar de manera directa vivienda a las familias de bajos ingresos. Por ejemplo, el gobierno se comprometió a suministrar 400 nuevas viviendas individuales en 2016 y a crear beneficios más transparentes en esta área.

Al inicio de 2017, el gobierno instauró también límites al mercado de alquiler de corto plazo, en parte para proteger a los arrendatarios, aunque se espera que la medida también contribuya a aliviar parte de las presiones que impulsan el alza de los precios de la vivienda.

 

Recursos adicionales

• How's Life? 2015: Measuring Well-being

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Israel, el hogar promedio tiene 1.2 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona.

 

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Italia, las familias gastan en promedio el 23% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Italia, el hogar promedio tiene 1.4 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. Sin embargo, en términos de servicios básicos, el 99.4% de las viviendas en Italia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Japón, las familias gastan en promedio el 22% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Japón, el hogar promedio tiene 1.9 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 93.6% de las viviendas en Japón tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra menor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Luxemburgo, las familias gastan en promedio el 21% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra ligeramente mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Luxemburgo, el hogar promedio tiene 2 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, casi todas las viviendas (99.9%) en Luxemburgo tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En México, las familias gastan en promedio el 18% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra menor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En México, el hogar promedio tiene 1.1 habitación por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona y una de las tasas más bajas en la OCDE. En términos de servicios básicos, el 74.1% de las viviendas en México tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra considerablemente menor que el promedio de la OCDE de 97%.

 

Mejores políticas para una vida mejor

Plan urbano inteligente

Para la administración actual es prioritaria la reforma en materia de vivienda y política urbana. El gobierno quiere reducir el déficit de vivienda que aún afecta a cerca del 35% de los hogares mexicanos, así como detener los modelos de desarrollo poco eficientes de las últimas décadas. A pesar de la rápida urbanización del país, hasta hace poco México carecía de una política que orientara el desarrollo urbano. En el pasado, las autoridades mexicanas se centraban en la construcción de viviendas, no en la planeación de ciudades, y la política urbana se derivaba por accidente de la política de vivienda. Pero ahora México está empezando a dejar atrás ese tipo de políticas.

El nuevo modelo de política urbana y de vivienda cambia de un enfoque con objetivos cuantitativos de vivienda a uno cualitativo más explícito que integra vivienda y medio ambiente urbano. Los objetivos se establecen de manera explícita en el Programa Nacional de Vivienda 2014-2018, que se propone: i) proporcionar una vivienda digna a los mexicanos, ii) solucionar la brecha de vivienda, iii) emprender la transición hacia un modelo de desarrollo urbano más inteligente y sostenible, y iv) mejorar la coordinación interinstitucional.

Renovar la vivienda social

La empresa privada Provive y la fundación Tú y Yo trabajan en colaboración para mejorar las condiciones físicas y sociales de los barrios de México. De manera conjunta, renuevan viviendas sociales abandonadas con el propósito de venderlas y estimular la regeneración urbana. Provive compra, repara y vende las casas, en tanto que Tú y Yo trabaja con la comunidad para desarrollar cohesión social. Provive apoya estos esfuerzos para hacer participar a la comunidad, con una aportación equivalente al 5% del precio de venta de la vivienda. Para 2015, se vendieron 2 000 casas en barrios mejorados en Tijuana, Mexicali y Ciudad Juárez.

 

Recursos adicionales

• How's Life? 2015: Measuring Well-being

 

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Noruega, las familias gastan en promedio el 18% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra menor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Noruega, el hogar promedio tiene 2.1 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, casi todas las viviendas incluidas en la muestra en Noruega tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, una proporción mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Nueva Zelanda, las familias gastan en promedio el 25% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, una de las tasas más altas de la OCDE, donde el promedio es de 20%.

 Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Nueva Zelanda, el hogar promedio tiene 2.4 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona y una de las tasas más altas en la Organización.

Mejores políticas para una vida mejor

Apoyar a familias de ingresos bajos con los costos de vivienda

La vivienda social puede desempeñar una función esencial en el alivio de la pobreza. En Nueva Zelanda, el gobierno toma medidas para mitigar la escasez de vivienda social y costeable. Las rentas de la vivienda social se fijan al 25% del ingreso familiar y se están revisando los arrendamientos existentes para mudar a quienes paguen alquileres a precios de mercado de la vivienda social, y así dejar espacio para personas más necesitadas. El Programa de Reforma de la Vivienda Social transferirá parte de la reserva de vivienda social de la Corona a proveedores de servicios comunitarios para que brinden mejor servicio a los arrendatarios y mejoren la eficacia del gasto público relacionado.

El gobierno vigilará de cerca la aplicación de estas reformas con el fin de evaluar los resultados sociales y de vivienda para arrendatarios que se mudan de viviendas sociales; la eficiencia en mejorar los resultados para los arrendatarios de vivienda social, y la idoneidad de las protecciones para prevenir que los operadores privados corran riesgos financieros excesivos. El número de unidades de vivienda social financiadas por el subsidio para arriendo relacionado con los ingresos también deberá aumentar de 62 000 unidades a 65 000 unidades en 2017/2018.

Mantener la vivienda caliente

En términos generales, el rendimiento energético de las edificaciones de Nueva Zelanda es bajo. En el periodo 2009-2016 los programas insignia Warm Up de Nueva Zelanda contaron con un presupuesto total de 350 millones de dólares estadounidenses para brindar a las familias subsidios orientados a mejorar el aislamiento y la calefacción de las viviendas. Los programas ayudaron a reequipar a casi 300 000 viviendas (o alrededor de 20% del parque inmobiliario), cerca de la mitad de las cuales eran ocupadas por familias de bajos ingresos. A partir de 2016, el programa se enfocó en el aislamiento de propiedades de alquiler ocupadas por arrendatarios de bajos ingresos con necesidades prioritarias de salud relacionadas con la frialdad y la humedad de las viviendas. La Ley de Enmienda de las Viviendas de Alquiler de 2016 estableció requisitos más estrictos para el aislamiento de pisos y techos en las viviendas de alquiler y de interés social.

 

Recursos adicionales

• How's Life? 2015: Measuring Well-being

 

 

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En los Países Bajos, las familias gastan en promedio casi 20% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra equivalente al promedio de la OCDE.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Países Bajos, el hogar promedio tiene 2 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, casi 100% de las viviendas incluidas en la muestra en los Países Bajos tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, en comparación con el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Polonia, las familias gastan en promedio el 21% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Pero, además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Polonia, el hogar promedio tiene 1.1 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona y una de las tasas más bajas en la Organización. En términos de servicios básicos, el 97.7% de las viviendas en Polonia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra ligeramente mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Portugal, las familias gastan en promedio casi 20% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra equivalente al promedio de la OCDE.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Portugal, el hogar promedio tiene 1.7 habitaciones por persona, cifra que coincide con el promedio de la OCDE. En términos de servicios básicos, el 99.1% de las viviendas en Portugal tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En el Reino Unido, las familias gastan en promedio el 23% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En el Reino Unido, el hogar promedio tiene 2 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 99.5% de las viviendas en el Reino Unido tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En la República Checa, las familias gastan en promedio el 23% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En la República Checa, el hogar promedio tiene 1.5 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, el 99.5% de las viviendas en la República Checa tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En la República Eslovaca, las familias gastan en promedio más de 27% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, una de las tasas más altas de la OCDE, cuyo promedio es de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En la República Eslovaca, el hogar promedio tiene 1.1 habitaciones por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona y una de las tasas más bajas en la Organización. En términos de servicios básicos, el 98.5% de las viviendas en la República Eslovaca tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Suecia, las familias gastan en promedio el 20% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra equivalente al promedio de la OCDE.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Suecia, el hogar promedio tiene 1.7 habitaciones por persona, cifra  que coincide con el promedio de la OCDE. En términos de servicios básicos, el 100% de las viviendas incluidas en la muestra en Suecia tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, en comparación con el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Suiza, las familias gastan en promedio más de 21% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Suiza, el hogar promedio tiene 1.9 habitaciones por persona, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona. En términos de servicios básicos, casi todas las viviendas incluidas en la muestra en Suiza tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, en comparación con el promedio de la OCDE de 97%.

Más Recursos

Aspectos clave

Contar con una vivienda adecuada es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, como la necesidad de abrigo, pero no se trata solo de tener cuatro paredes y un techo. La vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia. Todos estos elementos ayudan a hacer de una casa un hogar. Y, por supuesto, otro elemento clave es si las personas pueden costear una vivienda adecuada.

Los costos de vivienda consumen una gran proporción del presupuesto familiar y representan el gasto individual más grande para muchas personas y familias, al sumar elementos como el alquiler, gas, energía eléctrica, agua, menaje de casa o reparaciones. En Turquía, las familias gastan en promedio el 19% de su ingreso disponible bruto ajustado en mantener su vivienda, cifra menor que el promedio de la OCDE de 20%.

Además de los costos de vivienda, es importante estudiar las condiciones de vida, como el promedio de habitaciones compartidas por persona y si las viviendas tienen acceso a servicios básicos. El número de habitaciones de una vivienda, dividido entre el número de personas que la habitan, indica si los residentes viven en condiciones de hacinamiento. Una vivienda superpoblada puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, en las relaciones con otras personas y en el desarrollo de los hijos. Asimismo, el hacinamiento suele traducirse en un suministro inadecuado de agua y de servicios de alcantarillado. En Turquía, el hogar promedio tiene 1 habitación por persona, cifra menor que el promedio de la OCDE de 1.7 habitaciones por persona y una de las tasas más bajas en la Organización. En términos de servicios básicos, el 95.1% de las viviendas en Turquía tienen acceso privado a inodoros interiores con descarga de agua, cifra menor que el promedio de la OCDE de 97%.

 

Más Recursos